¡Shalom a todos! Respondo a un seguidor que me escribe:
“Buenos días Caritg, la espiritualidad no es para separar es para unir. Creo que te estas equivocando, mira al pueblo tibetano y verás cómo hay que realizar un trabajo, sin violencia. Y están en todo el mundo. Soy Catalán, y para colmo de Sabadell. Mis padres son Andaluces y me siento ciudadano del mundo, que Cataluña se expanda por el mundo si somos más inteligentes según algunos. Este planeta no tiene solución el ego ya está muy arraigado en la mente de los seres, no te compliques la vidad. Saludos de un seguidor tu yo (no dos)”

RESPUESTA: Shalom E.:

La espiritualidad separa lo verdadero de lo falso y no une indiscriminadamente. Está dicho: “Separarás lo sutil de lo denso …” (Y, luego ¡se vuelve a unir! Pero, ya todo es diferente) Evidentemente, se requiere gran formación y altos ideales para hacerlo con eficiencia.

Por otro lado, el pueblo tibetano está pagando las consecuencias de muchos siglos de gobierno erróneo, muchos siglos de mantener a sus ciudadanos – el pueblo llano – en la pobreza, en el fanatismo y en la ignorancia (y éstos, en su ignorancia, pagan por permitirlo) por medio de unas élites que, en su mayoría, fueron incapaces, dados los altos conocimientos que estaban a su disposición, de dar prosperidad, cultura y progreso a sus ciudadanos. Es necesario mirar en profundidad su historia, sino, puede creerse que lo que viven ahora es una casualidad. En cambio, es el efecto de su error como nación. Y no estoy hablando de su magnífica religión o de sus enseñanzas espirituales, ni exculpo a la China por su invasión. Ni siquiera, hablo de los verdaderos Maestros que puedan, quizás, morar allí. Pues, los Maestros no intervienen en los asuntos humanos. Son los seres humanos los que deben resolver sus propios asuntos, siguiendo Sus Enseñanzas e indicaciones o no (y pagando las consecuencias)

Es necesario mirar, también, la historia y el “nacimiento” de las naciones, tanto las recientes en el centro de Europa, como las de casi toda América y se verá cómo ha sido su independencia y cómo, masones y otros de mente muy lúcida han luchado, primero por la Libertad, segundo por la Igualdad y tercero, por la Fraternidad. Este último precepto  es el que engloba a la frase “ciudadanos del mundo”. Pero, ese concepto, queda en una simple frase vacía de contenido si los otros dos no se han conseguido. Fraternidad sin Libertad, entre otros vicios, es esclavitud; Fraternidad sin Igualdad, entre otros vicios, es hipocresía y engaño. La verdadera Fraternidad siempre va, en los humanos, en el tercer lugar.

En Cataluña se lucha por la Libertad de un pueblo, sin violencia, aunque sus dominadores y los emigrados de otras tierras (llegados y bien recibidos) tengan dificultad en reconocerlo, y, algunas veces en ser agradecidos. Esa lucha pacífica, sensata, esencialmente, proviene de aspectos profundos, muy grupales y de madurez evolutiva, a los cuales uno puede oponerse, puede dificultar su expresión, pero nunca detenerlos.

Estimado seguidor, Cataluña será nación independiente, tanto si es con mucho sufrimiento o sensatamente, si es con demoras o es ahora, si es con un entendimiento inteligente, cercano o lejano, por parte de todas las partes o si es sin acuerdo. Lo será, y, espero que todos nosotros, unos y otros, lo podamos ver y experimentar. La Independencia de Cataluña (y la transformación total de España) será un bien, para los de ahora y los que nos substituirán, aunque a algunos les cueste creerlo.
Finalmente, has de saber que confío plenamente en la capacidad evolutiva del ser humano y en su linaje de divinidad y sé que, más tarde o más temprano, quizás dentro de milenios, pero, sé que llegará el día en el que los pueblos manifestarán ciertamente la Libertad, la Igualdad y la Fraternidad (siendo , de verdad, ciudadanos del mundo) Un saludo cordial y gracias por intervenir. LVX